¡Madre mía, qué pavo tengo!

Definición de pavo (RAE):

1. (s. m. y f.) Ave gallofarme que puede alcanzar más de 1 m de altura, tiene la cabeza y cuello desprovistos de plumas y presenta en ellos unas carnosidades colgantes de color rojo; es muy apreciado en alimentación.

2. (s. m. y f.) Atontado, soso o sin gracia.

3. (s. m.) Moneda de cinco pesetas.

4. (s. f.) Colilla.

5. (compuesto) Ave galeiforme que presenta un acusado dimorfismo sexual; mide unos 250 cm de longitud, de los que 130 corresponden a la cola, que en el macho tiene vistosos colores y se despliega como reclamo sexual.

6. (loc.) Ponerse colorada una persona por vergüenza, timidez, etc.

Pues mi pavo no son todas esas cosas. Mi pavo es una tontería detrás de la otra, mi pavo y, creo que, el de casi todos los adolescentes, es un cambio de emociones en tan solo unos minutos.

Como os decía,  mi pavo se refiere a TONTERIAS, sí, con mayúsculas, que se lo merece. Estar en la adolescencia es un paso importante y difícil. Y ahí está nuestro pavo para sacarnos una sonrisa; con cosas de la infancia como cantando "el barquito chiquitito" o haciendo un baile en mitad del recreo,  cuando todos los mayores te están mirando y tú: “qué envidia me tienen, ojalá ellos pudieran hacer lo mismo”; o cuando te entra la risa floja y no puedes parar de reírte de una simple palabra como “zapato”; o gritar por el pasillo el nombre de una amigo y todos se den la vuelta para mirarte menos ese amigo; o reírte solo; o contar el chiste y que a nadie le haga gracia, personalmente me ha pasado muchas veces; o preguntar cosas sin sentido para irritar a la gente y que te digan: "Juliaaa ,vale ya".

Hacemos tonterías sin pensar en las consecuencias, como pasar la pelota en clase (no lo hagas corres peligro de que te pongan un parte, está comprobado). Aunque el pavo no solo se vive en solitario. Nooo, tus compañeros y amigos te ayudan con sus propias tonterías, más las tuyas es igual a reírse sin parar. En el pavo no solo entran las risas, sino que hay gente que se pone súper boba con algo así llamado el "amooor" que si se tiran todo la hora mirándose (con esa mirada perdida, que dices la despierto o la mato). Después que no pueden pensar más allá de ese chico, esos compis que te dicen: “Me ha visto. Me ama”. Créeme mejor no pegarles aunque tengas muchas ganas de hacerlo (yo las tengo…)

Según mi madre “menos mal que el pavo vuela que si no…” eso digo yo que a veces no me aguanto ni yo.  La adolescencia es única y aunque solo la he empezado tengo ganas de seguir con mi pavo y de ver lo que me espera…

Julia Alaniz. 1º E.S.O D